jueves, 3 de septiembre de 2009

Estadísticas Azucareras

El sector azucarero tiene gran importancia en la producción agroindustrial argentina, y una gravitación determinante en la economía del norte del país, especialmente en Tucumán. A partir de la desregulación del sector, en 1991, ha protagonizado una profunda transformación, y el fuerte incremento de su productividad lo llevó en 2005 a marcar el récord de 2,1 millones de toneladas de azúcar. Esto se logró gracias al trabajo en investigación genética (nuevas y mejores variedades de caña), el incremento de la inversión y a la optimización del proceso productivo.

EL MERCADO INTERNACIONAL

  • Según datos del Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA, según su sigla inglesa), la producción mundial de azúcar de la campaña 2004/2005 alcanzó los 140 millones de toneladas, un aumento del 21% con respecto a la temporada 1994/1995.

El 53% de la producción mundial está concentrada entre Brasil, la Unión Europea, China y la India. Estos países son además los 4 mayores consumidores, con un 42% de participación.

  • Pese a tratarse de grandes productores, tanto la India, como China y Estados Unidos no alcanzan a satisfacer su demanda interna.
  • Brasil, el líder mundial, más que duplicó su cosecha durante este periodo, alcanzando en la temporada 2004/2005 las 28 millones de toneladas.
    Este crecimiento se debe principalmente al desarrollo del programa proalcohol, que incentivó la plantación de caña de azúcar.
  • El 33% de la producción mundial de azúcar, se comercializa internacionalmente.
  • Los principales exportadores son Brasil, la Unión Europea, Tailandia y Australia, que exportan conjuntamente el 68% de lo transado mundialmente. El primero abastece el 39% de la demanda mundial, lo que lo ha convertido en formador de precios.
  • La demanda mundial de azúcar es encabezada por Rusia, que participa con el 10%.
  • A diferencia de las exportaciones, las importaciones están fragmentadas en una mayor cantidad de países. Considerados por regiones, los mayores demandantes de azúcar son el Norte Africano, Medio Oriente y Asia.

Nuevo escenario internacional

  • El hecho reciente más destacado en el panorama azucarero mundial, es el drástico aumento en los precios internacionales del producto tras haberse mantenido en torno a 200 y 250 US$ la tonelada (tomando como referencia el contrato N° 5 de Londres para el azúcar blanco) durante el quinquenio 2000/05. A mediados de 2005 los precios iniciaron una avanzada que se aceleró en los primeros meses del 2006, llegando a valores récord de US$ 480. Este proceso se ha desencadenado por una serie de cambios producidos en la oferta, en la demanda, y en los precios de otros bienes relacionados, entre los que sobresalen:
  • El uso del alcohol de caña (etanol) como combustible en Brasil (primer productor y exportador mundial) en reemplazo de derivados del petróleo, que ha desencadenado un dramático aumento en la cotización del azúcar. Brasil registra un notable aumento de la demanda de etanol por su uso como combustible en los motores flex-fluel, que utilizan indistintamente nafta o alcohol. A los valores actuales del crudo el precio internacional del ázucar se relaciona directamente con la evolución de aquél, ya que pone el piso de precio del mercado. Esto se explica por la doble funcionalidad de la caña de azúcar, que puede destinarse tanto a la producción de azúcar como a la de etanol. La influencia de este fenómeno registrado en Brasil sobre el mercado internacional, se debe a que este país abastece aproximadamente el 39% de la importación mundial de azúcar, convirtiéndose así en formador de precios del producto.

  • La radical reforma adoptada para el sector azucarero europeo (segundo exportador mundial), tras los fuertes reclamos de Brasil, Australia y Tailandia ante la OMC debido a los subsidios aplicados a las exportaciones. La organización requirió a la Unión Europea una fuerte disminución de los mismos, lo que quitará competitividad a sus exportaciones, por lo que se espera una progresiva reducción del área sembrada y una paulatina tendencia de sus exportaciones hacia la desaparición. En este sentido, ya se anunciaron cierres de fábricas en varios países europeos.
  • Caída de los stocks internacionales dado que ya van tres años seguidos que la producción no alcanza a abastecer la demanda, lo que se explica en parte por la caída de la producción en la India, Tailandia, China, EE.UU. y Australia. A esto se añade el hecho de que en Brasil algunos problemas climáticos no permitieron los incrementos esperados en sus exportaciones.
  • Un marcado crecimiento de la demanda de azúcar en países emergentes por el incremento del consumo de gaseosas y otros productos azucarados.
  • La presencia de capitales especulativos que buscan refugio en los commodities, agudizando así la suba acelerada de los precios.

Otras noticias del comercio mundial

  • La fuerte demanda y la expansión del mercado exportador con precios más rentables, incentivaron la replantación de caña en la India.
    Est
    e país supo ser el primer productor mundial, pero a consecuencia de la baja de precios que produjo el fuerte aumento de exportaciones del Brasil, había reducido el área sembrada para dedicarla a cultivos más rentables, quedando como tercer productor mundial. Se espera que la producción llegue a 18.5 millones de toneladas en la zafra que termina en septiembre, cifra que se hallaría un 42,3% por encima de los 14 millones de 2005. Además, se espera que la producción siga creciendo hasta alcanzar de 21 a 22 millones en la campaña que comienza en septiembre de 2007.
  • En EE.UU. (4to productor y consumidor mundial), se registró un aumento de la demanda importadora1en razón de los daños provocados por huracanes en los cañaverales de Louisiana y Florida. También influyó la reducción de la superficie cultivada con remolacha azucarera y el desplazamiento de la producción de jarabes de alta fructuosa (principales sustitutivos industriales del azúcar) hacia la producción de etanol.

Nuestro sector azucarero y el nuevo escenario

  • En 2005 la producción nacional de azúcar alcanzó el récord de 2,1 millones de toneladas. Contrariamente a la década de 1990, cuando el esfuerzo de los ingenios pasaba por exportar los excedentes de producción a precios menores que en el mercado interno, hoy el temor radica en un posible desabastecimiento interno por causa de los mayores precios internacionales.
  • Ante esta perspectiva, para poder aprovechar los buenos precios internacionales y no desabastecer al mercado interno la única alternativa es incrementar la producción. Esto se está logrando gracias a la mejora de productividad que ha permitido la introducción de nuevas variedades de caña, que aumentaron notablemente los volúmenes de cosecha y el rendimiento en sacarosa.

1 Esta situación es irrelevante,ya que determinó que dicho país incrementara la cuota de importación a diversas naciones entre las cuales se encuentra Argentina.

Nota: Los valores no son plenamente comparables entre sí, ya que el precio del contrato N° 5 es un valor FOB de azúcar blanco refinado puesto en Europa. Por esta razón hay diferencias en cuanto a la calidad del producto, a lo que habría que sumarle los gastos de exportación (tales como gastos portuarios, seguro, flete, etc). Lo que se desea expresar es el cambio de tendencia del precio internacional con respecto al precio del mercado interno.

LA PRODUCCION NACIONAL

La producción argentina de azúcar alcanzó en 2005 el récord de 2.138.825 toneladas a valor crudo, lo que supera en un 11,12% la marca máxima anterior, observada en el año 2003 y en un 43,5% la cosecha de 1995.

La producción de azúcar se concentra en las provincias de Tucumán, que produce el 62% del volumen, y en Salta y Jujuy, que procesan conjuntamente el 37%. En Tucumán la mayor parte de la caña es cultivada por cañeros independientes, mientras que en territorio salteño y jujeño la mayor proporción pertenece a los ingenios. La producción restante se registra en Santa Fe y Misiones, que cultivan principalmente azúcar orgánico.

  • Los ingenios instalados en el país son 23; 15 de ellos se encuentran en Tucumán, 3 en Jujuy, 2 en Salta, 2 en Santa Fe y uno en Misiones.
  • Según relevamientos del INTA, en la campaña 2004/2005 la superficie cultivada alcanzó las 306.630 ha (sin contar los cultivos del litoral, que son pequeños). De ese total, 213.820 correspondieron a Tucumán, 63.330 a Jujuy y 29.210 a Salta.
  • Para no perder productividad la renovación óptima del cañaveral debe efectuarse cada 5 años. Por esta razón se recomienda renovar anualmente un 20% del área sembrada.

Tucumán

  • En Tucumán la superficie cultivada presentó una tendencia decreciente desde la desrregulación de 1991. Desde entonces, parte de las tierras fueron cediendo terreno ante cultivos más rentables, principalmente limoneros. Según estimaciones de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC), las 250.000 has. cultivadas en 1991, fueron reduciéndose hasta alcanzar en 2001 183.390 has, un descenso del 27%.
  • No obstante, la producción de azúcar creció debido a innovaciones tecnológicas que lograron más que compensar la reducción del área sembrada. El año último los rindes alcanzaron un promedio de 63 ton/ha, valor que representa un aumento del 63% con respecto a las 38.68 ton/ha de 1990.
  • También ha mejorado el rendimiento industrial, que alcanzó en 2005 un promedio de 11,64 % de azúcar sobre peso de caña, un aumento del 20% con respecto a los 9,7 de 1990 y un 12% superior a los 10,42 de 2004.
  • Las consecuencias de la mayor productividad, sumadas a las mejoras técnicas y a la optimización del proceso productivo, aumentaron la producción tucumana un 106% entre 1990 y 2005, año éste en que alcanzó el récord de 1.333.453 toneladas (22% por encima del año anterior).

EL CONSUMO

  • El 40% del azúcar destinado al mercado interno se consume domésticamente, mientras que el otro 60% es utilizado como insumo para la industria. La elaboración de bebidas gaseosas demanda importantes volúmenes de azúcar, al igual que la de golosinas, la repostería, los helados, las mermeladas, los lácteos y las frutas en conserva.
  • Durante 2005 el consumo por habitante en Argentina fue de 39,27 kg/año, de modo que el azúcar proveyó el 35,97% de los hidratos de carbono diarios necesarios y el 21,51% de las calorías diarias necesarias, según la resolución del Grupo Mercado Común (GMC) N° 46/03 del rotulado nutricional para alimentos envasados.

  • Los edulcorantes de alta intensidad (no calóricos) y los jarabes de alta fructosa (edulcorantes calóricos) pueden reemplazar al azúcar en algunos alimentos y bebidas y se denominan, por tanto, sustitutos del azúcar. En Argentina los competidores del azúcar son los edulcorantes de bajas calorías (la sacarina, el aspartamo /nutrasweet y los ciclamatos) y los jarabes de alta fructosa.
Año
Producción
*(Tons)1
Importación
*(Tons.)1
Exportación
*( Tons.)1
Consumo
*(Tons.)2
1997
1.649.140
63.401
139.732
1.469.915
1998
1.749.184
393
178.106
1.468.664
1999
1.568.156
1.456
195.894
1.283.858
2000
1.557.703
1.583
184.482
1.284.864
2001
1.607.423
1.367
114.600
1.396.439
2002
1.655.616
972
271.024
1.294.920
2003
1.924.779
402
177.314
1.585.655
2004
1.815.845
7.384
229.056
1.489.881
2005
2.138.826
2.826
535.780
1.500.815


El consumo interno de azúcar no ha registrado grandes variaciones en la última década, ya que se trata de un alimento básico para la población y tiene un precio comparativamente reducido. El consumo aparente se ha estabilizado en los últimos tres años alrededor de 1,5 millones de toneladas. Por esta razón, los excedentes exportables guardan gran relación con la producción.

LA EXPORTACION

  • Los mercados argentinos tradicionales son principalmente el chileno y el norteamericano. El primero por una cuestión de cercanía, y debido a que es un país netamente importador de este producto. El caso de Estados Unidos es especial, ya que este país concede a la Argentina una cuota que prácticamente está libre de derechos de importación y que es vendida al precio del mercado interno norteamericano, normalmente muy superior al del mercado mundial.
  • El récord absoluto de las exportaciones provocó un cambio en la participación de los países destinatarios del azúcar argentino, al crecer los envíos de azúcar crudo. Esta situación se explica por la limitada capacidad del país para producir azúcar blanco refinado con estándar internacional, sumado a que los principales destinos regionales de este producto -entre los que se destaca Chile-, están llegando a su limite de absorción.
  • La exportación de azúcar crudo se canaliza en general a través de brokers internacionales, lo que permite diversificar y ampliar los destinos. Por esta razón los países destinatarios de azúcar crudo pueden variar de un año al otro con mayor facilidad.
  • En 2005 Rusia (1er importador mundial) se convirtió en el principal destino de las exportaciones argentinas, absorbiendo alrededor de 157.587 toneladas de azúcar crudo, un 63% por encima del tradicional mercado chileno, que creció alrededor del 23%. Entre los nuevos destinos del azúcar crudo se destacan Egipto, Irak y Túnez, que conjuntamente abarcaron el 21% (111.412 ton.) de las exportaciones argentinas del último año.

Perspectivas del sector

  • Resulta evidente que la situación actual del sector es muy buena, sea por los elevados precios internacionales como por las mejoras en productividad que se tradujeron en una mayor producción. Cabe preguntarse si esta situación puede mantenerse en el futuro y de qué modo se puede mejorar.
  • En cuanto a los precios internacionales, de mantenerse la actual tendencia en los precios del petróleo, es atendible que los del azúcar se mantengan elevados. También resultaría lógico que Brasil, por su tamaño y capacidad exportadora, siga siendo el formador de precios del producto.
  • En lo atinente a la producción argentina, se espera que siga aumentando, ya sea por nuevas mejoras productivas como por la ampliación de superficie cultivada. Cabe destacar que la capacidad de Salta y de Jujuy de extender sus cañaverales se halla limitada, ya que las áreas mejores y mas cercanas a los ingenios, están en explotación. En este sentido, debe tenerse en cuenta que la cercanía al ingenio es esencial debido al gran volumen de la cosecha, lo cual implica una importante logística (y costo) de transporte puesto que, una vez cortada, la caña pierde su rendimiento en sacarosa rápidamente.
  • La superficie plantada con caña en Tucumán tiene mayores posibilidades de verse incrementada, y es probable que con la mayor rentabilidad del sector, muchas tierras se redestinen a la siembra de caña. Los más optimistas afirman que el área sembrada puede incrementarse unas 40.000 hectáreas. Sea esto posible o no, está claro que la nueva situación impulsa la expansión de los cañaverales.
  • Es factible que la productividad del sector siga manteniéndose debido al destacado trabajo que realizan los centros de investigación, principalmente en materia de variedades más productivas y resistentes. A esto se suma el ingreso de grandes empresas con capacidad financiera para invertir en investigación y desarrollo, lo que abre al sector mejor perspectiva.

Como conclusión, puede afirmarse que las perspectivas son altamente favorables en cuanto a producción y precios, pero que resulta necesario seguir con especial atención las necesidades de la población. En tal sentido, el sector azucarero parece estar asumiendo una actitud responsable, priorizando el mercado interno y garantizando precios accesibles a un producto que tiene gran relevancia en la dieta diaria de los argentinos.

FUENTES CONSULTADAS

Centro Azucarero Argentino - C.A.R.T – INDEC – BCRA – EEAOC – INTA, “Relevamientos de cultivos en el NOA” – Amerop Corporation – USDA – Fuentes de la Industria – Publicaciones especializadas – Instituto mexicano del Petróleo – REUTERS - POLKAN, E.- “Efectos de la Desregulación sobre el Sector Azucarero Argentino”, 1998 – FAO - CAFAGDA - Dirección Nacional de Alimentos (SAGPyA).






Arcor fue fundada en 1951 en la ciudad de Arroyito, Córdoba (Argentina) con el objetivo de elaborar alimentos de calidad a un precio justo para consumidores de todo el mundo.

Con un crecimiento sostenido, la empresa se consolidó en un grupo industrial que se especializa en la elaboración de golosinas, galletas, chocolates, helados y productos alimenticios.

En cada uno de los negocios en los que participa, desarrolla marcas líderes que son preferidas por consumidores de los cinco continentes. Su amplia gama de productos es de alta calidad y diferencial. Desarrolla productos que contienen ingredientes funcionales y promueven un estilo de vida saludable.
La temprana vocación internacional del Grupo Arcor lo llevó a convertirse en el primer productor mundial de caramelos y el principal exportador de golosinas de Argentina, Brasil, Chile y Perú. Y a través de Bagley Latinoamérica S.A. es la mayor empresa de galletas de América del Sur.

Su liderazgo se construye a partir de un conjunto de pilares que caracterizan su gestión.
Una consistente política de exportación y de reinversión permanente de utilidades en desarrollos industriales, tecnológicos y comerciales. La construcción de un modelo de distribución exitoso que se replica en la región. La integración vertical de sus insumos estratégicos en la Argentina, la expansión de su importante patrimonio marcario, como así también, el desarrollo de una gestión socialmente responsable. Arcor busca crear valor económico, social y ambiental en toda su gestión
.


Arcor en Cifras

  • 57 años de trayectoria.
  • 20 mil colaboradores.
  • 41 plantas industriales: 30 en Argentina, 5 en Brasil, 4 en Chile, 1 en México y 1 en Perú.
  • 12 oficinas comerciales distribuidas en América, Europa, Asia y África.
  • 13 centros de distribución (6 en Argentina, 5 en Brasil, 1en Chile y 1 en Uruguay).
  • Elabora más de 1.500 artículos por año.
  • El volumen de producción es de 3 millones de kilogramos diarios.
  • Realiza más de 100 lanzamientos por año.
  • Exporta sus productos a más de 120 países de los 5continentes.
  • Facturación 2007: US$ 1.850 millones.
  • Exportación 2006: US$ 310 millones.
  • Inversiones 2006/2007: US$ 170 millones.
  • Ubicada en el puesto número 15 en el Ranking publicado por la Revista internacional Candy Industry, es la principal empresa latinoamericana del sector.
  • Por quinto año consecutivo es la empresa N°1 en imagen de la Argentina en el ranking publicado por el diario nacional Clarin.
  • Produce 70 comerciales al año en la Argentina.
  • Cuenta con un banco marcario con cerca de 10.000marcas.
  • Produce 133.244 toneladas de azúcar en su Ingenio La Providencia (Río Seco - Tucumán, Argentina).
  • Cuenta con 2.900 vacas de ordeñe que producen 90 mil litros diarios de leche.
  • Produce 250 mil toneladas de papel y cartón corrugado al año a través de Cartocor S.A.
  • A través de Converflex S.A. participa en el mercado de envases flexibles desde hace 40 años y cuenta con una capacidad instalada de 12 mil toneladas al año.
  • El Sistema de Distribución Minorista de Arcor realiza 3visitas semanales a 240 mil puntos de venta, cuenta con1.053 vehículos de reparto de la fuerza de ventas, 160distribuidores oficiales y 2.500 vendedores.
  • Arcor provee trabajo a más de 7.700 Pymes.
  • La Fundación Arcor, con 15 años de gestión, apoya a más de 1.450 proyectos educativos, involucra a más de 1 millón de niños, niñas y adolescentes de toda la Argentina.
  • El Instituto Arcor Brasil cuenta con 44 proyectos financiados en los que 126.404 niños y niñas son protagonistas.

http://www.youtube.com/watch?v=UhhBlgR5FxU

Ingenios en Tucumán


Ingenio Aguilares


Firma Nuevo Aguilares S.A.
Dirección Alberdi 599
Localidad Aguilares
Provincia (4152) Tucumán
Teléfonos (543)865-48-3029
Fax (543)865-48-3029

Ingenio Bella Vista

Firma José Minetti & Cía. Ltda. S.A.C.I.
Dirección Ingenio Bella Vista
Localidad Bella Vista
Provincia (4168) Tucumán
Teléfonos (543)81-482-0137, (543)81-482-0142, (543)81-482-0168
Fax (543)81-482-0137, (543)81-482-0142, (543)81-482-0168


http://www.youtube.com/watch?v=-KdK_GuKS2k





Ingenio Cruz Alta

Firma Corporación de Alimentos e Industria S.A.
Dirección San Martín 80
Localidad Colombres
Provincia (4111) Tucumán
Teléfonos (543)81-4916001, (543)81-4916002, (543)81-4916020
Fax (543)81-4916001 (interno 213)
E-mail cruzalta@tucbbs.com.ar
caisa@tucbbs.com.ar

Ingenio La Florida

Firma Cía. Azucarera Los Balcanes S.A.
Dirección José María Landajo s/n
Localidad Dpto. Cruz Alta
Provincia (4117) Tucumán
Teléfonos (543)81-492-2011
Fax (543)81-492-2011



Ingenio La Providencia

Firma Arcor S.A. I.C.
Dirección Alberdi 244
Localidad San Miguel de Tucumán
Provincia (4000) Tucumán
Teléfonos (543)863-47-1079
Fax (543)863-47-1079
E-mail jarrimad@arcor.com.ar

Ingenio La Trinidad

Firma Trial S.A.
Dirección 24 de Setiembre 754 - Piso 1° - Of. 1 y 2
Localidad San Miguel de Tucumán
Provincia (4000) Tucumán
Teléfonos (543)81-421-5347
Fax (543)81-421-0907

Ingenio Leales

Firma Moon - Mate S.A.
Dirección Pasaje Castelli 304
Localidad La Encantada
Provincia (4111) Tucumán
Teléfonos (543)81-450-2800, (543)81-450-2801, (543)81-450-2802
Fax (543)81-450-2824, (543)81-450-2825

Ingenio Marapa

Firma Ingenio y destilería Marapa S.A.
Dirección Av. Sortheik y Av. Campero
Localidad Juan B. Alberdi
Provincia (4158) Tucumán
Teléfonos (543)865-47-1938, (543)865-47-1939

Ingenio Nuñorco

Firma S.A. SER
Dirección 24 de Septiembre 1034
Localidad San Miguel de Tucumán
Provincia (4000) Tucumán
Teléfonos (543)81-431-1159, (543)81-431-0135
Fax (543)81-431-1680
E-mail riochicsa@infovia.com.ar



Ingenio Santa Bárbara

Firma Azucarera Juan M. Terán S.A.
Dirección 24 de Septiembre 1034
Localidad San Miguel de Tucumán
Provincia (4000) Tucumán
Teléfonos (543)81-431-1159,(543)81-431-0135
Fax (543)81-431-1680
E-mail riochicsa@infovia.com.ar

Ingenio Santa Rosa

Firma Cia. Industrial de Alimentos S.A.
Dirección San Martín 784 - Piso 1° A
Localidad León Rouges - Monteros
Provincia (4143) Tucumán
Teléfonos (543)81-421-6960
Fax (543)81-421-6960

Centro Azucarero Regional de Tucumán - CART -

Presidente Ing. César Paz
24 de septiembre 582 - Piso 1º - Of. 4
4000 - San Miguel de Tucumán
República Argentina
Teléfonos (543)81-431-1638, (543)81-421-9200
Fax (543)81-421-9201
E-mail cart_bossi@cpsarg.com

Definiciones generales de la caña de azucar.

Caña: es la materia prima normalmente suministrada a la fábrica y que comprende la caña propiamente dicha, la paja, el agua y otras materias extrañas,

Paja: es la materia seca, insoluble en agua, de la caña

Jugo Absoluto: son todas las materias disueltas en la caña, mas el agua total de la caña.

Bagazo: es el residuo después de la extracción del jugo de la caña por cualquier medio, molino o presa.

Jugo Residual: es la fracción de jugo que no ha podido ser extraída y que queda en el bagazo.

Brix: el Brix de una solución es la concentración (expresada en g de concentrado en 100 g de solución) de una solución de sacarosa pura en agua.

Pol: es la concentración expresada en g de solución en 100 g de solución. De una solución de sacarosa pura en agua


jueves, 27 de agosto de 2009

Azúcar



Archivo:Sugar 2xmacro.jpg
Magnificación de los granos de azúcar, mostrando su estructura cristalina monoclínicahemihedral.

El sector azucarero tiene gran importancia en la producción agroindustrial argentina, y una gravitación determinante en la economía del norte del país, especialmente en Tucumán. A partir de la desregulación del sector, en 1991, ha protagonizado una profunda transformación, y el fuerte incremento de su productividad lo llevó en 2005 a marcar el récord de 2,1 millones de toneladas de azúcar. Esto se logró gracias al trabajo en investigación genética (nuevas y mejores variedades de caña), el incremento de la inversión y a la optimización del proceso productivo.

Tipos de Azúcar

El azúcar se puede clasificar por su origen (de caña de azúcar o remolacha), pero también por su grado de refinación. Normalmente, la refinación se expresa visualmente a través del color (azúcar moreno, azúcar rubio, blanco), que está dado principalmente por el porcentaje de sacarosa que contienen los cristales.

La elección de uno u otro tipo de azúcar para el consumo debe depender únicamente del gusto personal del consumidor y no tanto de unas virtudes nutricionales, las cuales muchas veces son exageradas, ya que tendrían que consumirse grandes cantidades para notar alguna diferencia.

§ Azúcar moreno, el auténtico azúcar moreno (también llamado “negro” o “crudo”) se obtiene del jugo de caña de azúcar y no se somete a refinación, sólo cristalizado y centrifugado. Este producto integral, debe su color a una película de melaza que envuelve cada cristal. Normalmente tiene entre 96 y 98 grados de sacarosa. Su contenido de mineral es ligeramente superior al azúcar blanco, pero muy inferior al de la melaza.

§ Azúcar rubio, es menos oscuro que el azúcar moreno o crudo y con un mayor porcentaje de sacarosa.

§ Azúcar blanco, con 99,5% de sacarosa. También denominado azúcar sulfitado.

§ Azúcar refinado o extrablanco es altamente puro, es decir, entre 99,8 y 99,9 % de sacarosa. El azúcar rubio se disuelve, se le aplican reactivos como fosfatos, carbonatos, cal para extraer la mayor cantidad de impurezas, hasta lograr su máxima pureza. En el proceso de refinamiento se desechan algunos de sus nutrientes complementarios, como minerales y vitaminas

Archivo:Zucker 150 fach Polfilter.jpgCristales de azúcar bajo el microscopio polarizante






lunes, 10 de agosto de 2009

La economia nacional de los años '60

La década de 1960 produjo un giro en materia económica. En el contexto del modelosustitutivo de importaciones, la industrialización tuvo en esta etapa, entre suscaracterísticas salientes, una expansión de la industria pesada y semipesada, unfortalecimiento de los sectores más concentrados de la economía, y una participacióncreciente en la producción de las empresas transnacionales. Esta orientacióneconómica cobró impulso con el gobierno de Frondizi y se profundizó con la dictadura militar de Onganía.El desarrollismo impulsado por Frondizi entre los años 1958 y 1962, tuvo comoestrategia económica el fomento de la industrialización de las ramas de manufactura pesada y semipesada. Dicho objetivo implicaba enormes inversiones para lo cual, el gobierno de Frondizi, propició la llegada de grandes masas de capitales extranjeros.Así, comenzaba a crecer la participación de las multinacionales en la producción local.Durante la gestión desarrollista se expandieron los sectores más dinámicos ymodernos mientras que se benefició a los sectores más concentrados de la economía.El gobierno tuvo un rol activo orientando las inversiones hacia determinados sectores yfomentando ciertas actividades.En el período 1963-1966 se produjo una ruptura con la orientación desarrollista. Illia impulsó una política fiscal y monetaria expansiva lo que, junto a una coyuntura externa favorable por la suba de los precios de los bienes argentinos exportables, permitió un importante crecimiento económico.La dictadura de Onganía puso fin en el año 1966 al gobierno de Illia. A partir deentonces, la modernización y la eficiencia del sector productivo se convirtieron en los objetivos de los hombres de la “Revolución Argentina”. Dicha orientación implicó un cambio radical con respecto a las políticas proteccionistas que distintos gobiernos implementaron en el pasado.“Desde la óptica de Krieger, los problemas económicos argentinos se debían a loselevados índices de ineficiencia existentes tanto en el sector público como en elprivado. Para acabar con tales problemas era necesario realizar una redistribución de recursos, pero no entre los distintos sectores económicos, sino entre las actividades de cada sector” (Rapoport, 2002: 641). Ello explica el hecho de que si bien hubo crecimiento económico, el mismo no benefició a todos los sectores de la economía.El sector que más beneficios obtuvo con la orientación económica impuesta por elgobierno de Onganía fue la gran burguesía, sobre todo extranjera. Hubo un3 crecimiento notable de las empresas transnacionales que aumentaron su participación en la producción industrial.El avance de las grandes empresas tuvo como contrapartida el quiebre de numerosas pequeñas y medianas empresas nacionales, muchas de las cuales fueron adquiridas por capitales extranjeros, lo que contribuyó en aquellos años al proceso de desnacionalización de la industria local. De conjunto, el sector industrial sufrió internamente un proceso de concentración y centralización de la propiedad.En el plano laboral, tanto la experiencia desarrollista como el gobierno de Onganíafueron perjudiciales para los trabajadores. En la etapa de Frondizi los asalariadossufrieron una caída en el salario real, una disminución de su participación en el ingreso nacional, y un incremento de la desocupación. Por su parte Krieger Vasena, ministro de economía de Onganía, al tiempo que suspendió los convenios colectivos de trabajo, otorgó por única vez un aumento salarial. De esa forma “…a partir de laRevolución Argentina el incremento del ingreso de los asalariados se reducedrásticamente en relación al trienio anterior” y “[…] se produce una drástica caída en los salarios reales…” (Aspiazu et al, 1976: 597 y 599). Ello implicó una disminución en la participación de los trabajadores en el ingreso total.

Historia de la zafra




28 de junio de 1966 los militares tomaron el poder en Buenos Aires y, menos de dos meses más tarde, enviaron quinientos gendarmes y policías federales a la provincia de Tucumán para ocupar y cerrar por la fuerza siete fábricas azucareras. En el curso de los años que siguieron, sucesivas medidas de aquel Poder Ejecutivo Nacional (PEN) condujeron a la clausura definitiva de 11 de los 27 ingenios que operaban en la provincia, desatando un auténtico cataclismo social y económico. Las medidas del régimen militar comprendieron, además, la eliminación de unos 10.000 pequeños productores cañeros y la reducción de 120.000 hectáreas de cultivos. La provincia se sumergió en el marasmo más completo a medida que su producción se contraía en un 40 por ciento y que la desocupación arrojaba al exilio interior a unos 200.000 tucumanos. Los cierres, la parálisis económica y las quiebras se extendieron por toda la provincia, afectando a la actividad manufacturera, artesanal y mercantil que se vinculaba estrechamente con el ciclo anual de la zafra y la molienda: grandes y pequeños comerciantes, proveedores de máquinas y herramientas para los ingenios y las fincas cañeras, carpinteros y herreros, tenderos, almaceneros e infinidad de pequeños comerciantes. Varios miles de zafreros santiagueños y catamarqueños, que arribaban cada año para las cosechas, perdieron a su vez lo que representaba su fuente de trabajo principal en una lenta agonía que puso fin, con el tiempo (porque a ello contribuiría, también, la creciente tecnificación del agro tucumano), a esa migración estacional que poblaba periódicamente los campos tucumanos. Al finalizar la década, el territorio de Tucumán se asemejaba a un 'paisaje después de la batalla', sembrado de pueblos fantasma, en los que sólo quedaban niños, mujeres y ancianos. Buenos Aires y las ciudades del Litoral argentino tendrían que experimentar la década menemista para conocer, recién, una situación parecida.
En aquel escenario dantesco, la dictadura militar escogió como uno de sus blancos principales a la Compañía Azucarera Tucumana (CAT), cuatro de cuyos cinco ingenios fueron clausurados por el 'plan' de Salimei para Tucumán, anunciado el 21 de agosto de 1966. De las fábricas que conformaban el grupo CAT, que representaba un 20 por ciento de la producción azucarera tucumana, al menos tres se contaban entre las más eficientes de la actividad. La misma enormidad del despropósito, que amenazó con provocar una guerra social (que nunca llegó, sin embargo, como no fuese bajo la forma de desesperadas e ineficaces rebeldías, pero que alimentaría poco después los brotes de terrorismo y de contraterror criminal del Estado) obligó a Onganía a permitir que la CAT reabriera, en 1967, dos de los ingenios que le habían clausurado. A los pocos años, sin embargo, los funcionarios del PEN militar tramaron un complot para presentar a los directivos de la firma como los autores de un escandaloso negociado, que la prensa de todo el país calificó como el 'affaire del azúcar', una especie de supremo negociado del siglo. Los empresarios de la CAT fueron perseguidos, apresados, procesados y, cuando todo eso no resultó suficiente, los militares los convirtieron en prisioneros 'a disposición del PEN', sin necesidad de acusación alguna, invocando el estado de sitio que habían impuesto. La CAT fue intervenida, confiscada y obligada a una quiebra forzosa, y sus bienes y fábricas fueron traspasados a una empresa estatal creada para tal fin, la Compañía Nacional Azucarera S.A. (CONASA), administrada por coroneles, cuya existencia se prolongó hasta que una nueva dictadura militar, la del 'Proceso', reprivatizó los ingenios, rematándolos a precio vil. ¿Qué significado debemos darle a esos acontecimientos, en particular a la persecución encarnizada contra la CAT? ¿Tienen alguno? Para comenzar, digamos que gran parte del país se tragó la fábula, creada por aquellos gobernantes, de que habrían actuado para 'racionalizar' la actividad, para castigar la delincuencia económica y 'moralizar' su industria azucarera, y para promover al fin el desarrollo de la provincia de Tucumán. Semejante credulidad puede comprenderse porque la mayoría de la gente que compone nuestra sociedad estaba preparada para creerlo y, sobre todo, porque quería creerlo; y porque a ciertos industriales azucareros rivales, tanto de Tucumán como a los de afuera, en particular los grupos de Arrieta-Blaquier y Patrón Costas (propietarios de los ingenios Ledesma y San Martín de Tabacal en Salta y Jujuy), les convenía propagandizar la impostura, debido a que fueron cómplices y beneficiarios de la intriga. La demolición de la CAT fue sólo una parte de la brutal amputación practicada en la economía tucumana, pero lo curioso, y en cierta medida trágico, es que ese feroz ataque contra la provincia nunca fue considerado como tal ni siquiera en la propia provincia, sino como una crisis natural e inevitable de su enferma economía. La abrumadora mayoría de las descripciones históricas usuales contienen esta narrativa, que denominé en otro trabajo como la sacarofobia de la cultura argentina , con lo que aludo a un componente cristalizado como el azúcar, pero cristalizado en el cerebro de los argentinos, y especialmente en el de los porteños. La sacarofobia es un ideologema, una falacia, un argumento que no es verdadero, aunque presente la apariencia de tal; se funda en una petición de principio que integra la mentalidad promedio del país, y no tan promedio, porque la sacarofobia es cultivada y argumentada por historiadores, sociólogos y economistas de todas las escuelas y todas las ideologías, desde la izquierda a la derecha del espectro político e intelectual argentino. En pocas palabras, la sacarofobia es la representación de todo lo que tiene que ver con el mundo azucarero de Tucumán (¿quién sabe qué es Ledesma, o Tabacal, cuando se habla del atraso tucumano?) como el compendio del mal encarnado en la historia: el mal en un sentido moral, porque sus propietarios habrían sido -hasta hoy- unos malvados explotadores, ricos ausentistas y ladrones del fisco; el mal en un sentido físico o material, porque los sacarófobos imaginan que los ingenios tucumanos no son más que chatarra obsoleta; el mal en un sentido histórico, en fin, porque la sola palabra azúcar evoca a unos industriales presuntamente incompetentes que impusieron un modelo de sociedad retrógrada, edificado sobre la injusticia social. Como todo mal verdadero, metafísico y absoluto, el mundo azucarero tiene la propiedad de ser una pesadilla recurrente para el sacarófobo, un mal de nunca acabar. ¿Cuándo terminará la pesadilla del azúcar, cuándo dejaremos de oír reclamos provenientes de esa provincia?', se pregunta el sacarófobo, y sueña con el fin de la historia azucarera de Tucumán. Ahora bien, un motivo universalmente aceptado del credo sacarófobo consiste en la referencia a 'los ladrones de la CAT': este motivo es uno de los dogmas del credo y constituye un rasgo casi idiosincrásico de todo argentino (como de la mayoría de los tucumanos) de aquella generación que conserva alguna memoria histórica de los años 1960' y 1970'. ¿Tiene algo que ver todo esto con el mundo real? En realidad carece de importancia, porque un ideologema no necesita de ninguna correspondencia con el mundo real, ya que se alimenta de otras fuentes, que no son sin duda las empíricas. Porque la sacarofobia es un cristal mental que, a diferencia del azúcar, no se disuelve con nada. Sin embargo, como no llevaré mi escepticismo al extremo, la anécdota contenida en este trabajo debe leerse como una invitación a reconsiderar la historia reciente del país.